CINE.- X-MEN 3

Muchas críticas se han vertido en relación al filme, por un lado los amantes del comic divididos entre el agrado y la amargura, ante otro bando de gente que asiste al cine a disfrutar considerandola buena y aceptable, claro está que nunca se logrará convencer a aquellos detractores de la fantasía y la ficción. En lo particular la calificó como buena película, si se han percatado de mis criticas, nada más analizó aquellas que consideró “filmes aceptables” y este es uno de ellos. A continuación crónica y mis argumentos, si usted no la ha visto y no desea saber deje en este momento de leer, nada más le recuerdo mantengase en su butaca hasta el final de los créditos.

La película comienza veinte años atrás con la historia del niño mutante Ángel, el cuál intenta cortarse las alas para que su padre no lo descubra, sin embargo no lo logra y su padre intentara por todos los medios conseguir una cura que nulifique el gen mutante.

Mientras tanto se efectúa un encuentro en la sala de entrenamientos de la escuela para mutantes del Profesor Charles Xavier (Patrick Stewart), en la cuál aparecen los robots conocidos como Centinelas, sirve de paso aclarar que quien haya leído el comic, sabrá que los Centinelas se apoderarán del mundo y combatirán contra los hombres X. Aquí encontramos una contradicción con la historieta, puesto que dichos robots son creados por un enemigo del alto mando de la Casa Blanca, el cual detesta a los seres “fenómenos”.

La trama del filme se desarrolla en la creación del antídoto que transforma a los mutantes en gente normal, lo cual consigue el padre de Ángel, he aquí el gran meollo del asunto, ya que algunos seres superdotados, preferirán volver a ser humanos y aceptados ante la sociedad para hacer una vida normal, como es el caso de Rogue (Anna Paquín), chica que sufre en demasía ya que cuando es tocada absorbe la energía de la otra persona/mutante, lo cual vuelve su vida insoportable.

Si recordamos las anteriores películas que por cierto ya no los realiza el anterior Director Brian Synger (por preferir realizar la película de superman), en X-men II Jean Grey o Phoenix (Famke Janssen), aparentemente muere sepultada por las aguas, sacrificándose por sus compañeros, en esta 3era entrega ella regresa como el Fénix mitológico de las cenizas, su regreso es provocado por el amor de Cyclop o Cíclope (James Marsden), el cual prácticamente abandona a Charles Xavier para buscarla en el lugar que ella aparentemente había fallecido, sin embargo vaya sorpresa la escena en que emerge de la antigua represa y se reúne con su amado. En esta toma da la impresión de asesinar a Cyclop, ya que vuelve como un ente oscuro, dos personas en el cuerpo de una, pero digo que da la impresión puesto que nada más se encuentran los lentes de Cíclope más no su cadáver y hago énfasis en esto por la costumbre de nuestro nuevo director de engatusarnos en el filme (lo cual lo realiza de maravilla).

Posteriormente Phoenix en estado amnésico, no recuerda que paso con Scott Summers (Cyclop), Charles intenta saber lo ocurrido, aquí tenemos otro flashback en la pantalla, mostrándonos un Magneto y Profesor X, amigos y mucho mas jóvenes, felices de encontrar una mutante de nivel Omega o No 5, dicha niña presentaba un inmenso poder mas grande que cualquier mutante conocido, pero tal poder era incontrolable por lo que Charles realizó experimentos en la mente de Jean Grey provocando su división interna, pero alejando así su lado negativo que desafortunadamente despertaría en la forma del Fénix Oscuro. Esta parte me parece una excelente adaptación.

Por otro lado Magneto inconforme por la cura, decide formar una revuelta entre sus allegados y arma todo un ejército de mutantes a su servicio, con el firme propósito de destruir la cura. Destacando en estas fases la labor de Mystique (Rebecca Romijn Stamos), la cual funge de soplona informándole a Magneto la localización de la cura, para ello se dejó atrapar por las autoridades del gobierno el que a su vez persigue a Magneto por ser una amenaza en potencia, recordemos los filmes anteriores. Magneto libera a su aliada y otros mutantes considerados como amenazas, los cuales se convierten en sus fervorosos súbditos. Vale la pena recalcar la escena en que Mystique se sacrifica por Magneto, al impedir que una bala de plástico con la cura lo impacte. Pienso que en ese sacrificio se perdió uno de los mejores personajes del filme, aquí difiero con el Director, pero sin embargó le añade un atmósfera mas de pesadumbre.

Jean Grey escapa de la mansión de Charles dirigiéndose a su antiguo hogar de pequeña, ahí la buscan tanto Magneto que desea convertirla en su aliada, como Charles que desea que vuelva a ser la de antes. Tremenda escena en la cual la furia del Phoenix se manifiesta y termina asesinando a Charles (cosa que aclaró en mi penúltimo párrafo), Magneto la persuade y se convierte en su arma secreta en la batalla por la cura.

Una vez establecidos ambos bandos, quien asume la capitanía de los Hombres X es Halle Berry quien protagoniza a Storm o Tormenta (una vez más apegada al comic), los que unánimemente deciden proteger la sustancia prodigiosa y evitar una guerra de proporciones inimaginables. En este lapso del filme, surge la escena que más me impactó, un actor Ian McKellen soberbio en su papel de Magneto, que eleva el puente de San Francisco con su magnífico poder, enlazándolo a la antigua prisión de Alcatraz lugar de la Cura. El ejercito de mutantes se enfrenta a rifles poderosos provistos del remedio que deja inermes a los seres especiales, aquí todo se convierte en una masacre, Magneto no lanza sus mejores hombres a luchar, sabiamente como en las batallas épicas primero va “la carne de cañon” y pronuncia una soberbia frase: “adelante los peones luego las fichas principales” en alusión a su selectiva guardia.

Los X-Men se trasladan y junto a los militares protegen la base, se desata un infierno completo y los momentos finales llegan… un Wolverine (Hugh Jackman) que distrae a Magneto y un Bestia (Kelsey Grammer) que lo ataca por la espalda inyectándole la sustancia prohibida e inhibiendo así sus prodigiosos poderes… un momento tan trágico, los ojos desorbitados de uno de los mutantes mas poderosos que irónicamente se convertía en humano, que no decir de la magistral música de John Powell que superó con creces la de Ottman en X-Men 1 y 2. Cuando aparentemente el mal es derrotado, la excelsa Phoenix deslumbra con su poder ilimitado, que sin embargo en un momento de conciencia vuelve a ser Jean Grey y suplica a Wolverine (perdidamente enamorado de ella) que la asesine… y él la traspasa con sus garras de adamantium.

Conclusión inesperada nos presenta, ya que en las escenas finales aparece un Eric Lensherr (Magneto) jugando ajedrez en un parque plagado de gente mayor, humano e indefenso, sorprendentemente mueve una ficha con su poder… ¡si! Leyó usted bien, no perdió su poder o bien la cura no era perfecta, o simplemente el poder de Magneto era tan grande que por sí mismo la anulo. Pero mayor sorpresa al terminar los créditos la toma en que se encuentra, un Xavier recuperándose en un hospital con su vieja amiga Moira, nos demuestra que no muere en el combate contra Jean Grey…

Destaca por su pésima actuación Halle Berry la inmerecida ganadora del Oscar, se lleva las palmas Ian McKellen con su esplendoras actuación, quien por cierto interpretará al Rey Lear en el 2007. Se felicita rotundamente al Director Brett Ratner y al guionista Simon Kinberg por la sabiduría aplicada en su realización, no solo lograron hilvanar una película en la forma adecuada, sino que lo obtivieron con una serie compleja y difusa como son los hombres X, mejor adaptación no podía realizarse, supero con creces a sus antecesoras, al ex-Director Brett Ratner ni quien lo extrañe que fracasé con la tan trillada Superman. ¡Hasta la próxima!.